PRIMEROS ESTADOS NACIONALES Y NACIMIENTO DEL CAPITALISMO
LOS SOBERANOS SE VUELVEN ABSOLUTISTAS
Una primera manifestación política en la formación de los Estados nacionalesf ue la creación de la monarquía absoluta como forma de gobierno.
ESTADOS NACIONALES Y NACIMIENTO DEL CAPITALISMO
¿En qué consiste este absolutismo? Consiste para el soberano en la falta de control sobre su actuación, no en la ausencia de límites a su autoridad.
En la Edad Media, como hemos visto, existía la figura del rey, de un rey sin autoridad, débil y por lo tanto sólo existía en teoría, por cuanto en la realidad todos los barones feudales (nobleza) eran independientes.
Mencionemos algunas características generales del establecimiento de la monarquía y de los acontecimientos que se sucedieron a partir del siglo XVI, aunque a nivel particular, en los diferentes países, haya grandes diferencias.
En primer lugar pensemos en el fortalecimiento que los reyes tuvieron en su alianza con las ciudades basada en los intereses comunes de los reyes y la clase burguesa; en segundo lugar, es importante saber que a los dos les convenía un Estado centralizado, que facilitara el comercio y las comunicaciones; en tercer lugar, quedaron restringidos los derechos de soberanía de los señores feudales y su función ya no fue política sino decorativa.
Durante el absolutismo se consolidan los Estados Nacionales que, de una parte, retoman el poder sobre los feudos y de otra, se independizan del Papa. En esta época la sociedad estaba dividida en varias capas: La nobleza, la cuál a pesar de haber perdido su poderío político, conserva gran parte de sus privilegios económicos. Esta se divide en alta y baja nobleza. El clero, que por su poder económico también ejercía un poder importante, se divide en alto y bajo clero. La alta nobleza y el alto clero vivían en la corte mientras que el bajo clero se identificaba con los pobres.
Existía otra capa social, y este es otro aspecto importante de la época por cuanto los comerciantes e incipientes industriales ascienden hasta convertirse en lo que se conoce como la burguesía, llamada también el tercer Estado, cuya alianza con la monarquía creó la base fundamental del régimen absolutista.
Los pasos que la autoridad Nacional tuvo que recorrer para ejercer el poder real fueron lentos e irregulares; no se tardó ni un año, ni diez, ni cien; se tardó siglos, pero al fin la autoridad central se impuso.
FRANCIA, PRIMER ESTADO EN CONSOLIDAR SU MONARQUÍA
Hacia el año de 1492 el dominio real se extiende sobre la mayor parte del reino y el centro del gobierno, ahora, es la corte compuesta por: la cámara, el consejo del rey y otros.
El campesino que quería arar su campo, el artesano que quería continuar con su oficio, el comerciante y el pequeño industrial, acogieron el gobierno central.
Pero a pesar de esta unidad, había en toda Europa y especialmente en Francia mucha miseria provocada por las guerras como la Guerra de los Cien Años entre Francia e Inglaterra y las guerras religiosas que se produjeron en Francia entre católicos y protestantes (hugonotes) y que dejaron a esta última en la
crisis más grande que se haya vivido.
La gran preocupación era la paz, y ésta llegó después de que se firmó el Edicto de Nantes el 13 de febrero de 1598 con el cual se concedió libertad religiosa e igualdad política a católicos y hugonotes.
Con Luis XIII, hijo y sucesor de Enrique IV, se inicia un proyecto de reconstrucción económica cuyo protagonista es el ministro cardenal Richelieu, quien comparte con la monarquía diversas opiniones que expresan que la persona del rey es la “imagen viviente de la divinidad”. El rey sólo tienen que rendir cuentas a Dios y por eso el respeto que se le debe toma un aspecto místico. Se empieza a concebir el Estado como la expresión de la nación, cuerpo viviente cuya cabeza es el rey. La razón de ser del Estado se convierte en la ley natural de ese cuerpo. Sólo el rey conoce los verdaderos intereses del Estado y las condiciones de salvación pública.
A partir de 1642, de nuevo Europa se ve envuelta en una serie de guerras civiles en donde los españoles se enfrentan a los holandeses y luego a los portugueses. Es importante señalar, entre los muchos conflictos, la guerra entre Francia y España.
Este conflicto entre las dos naciones culmina en 1648 con el Tratado de Westfalia, con el cual Francia consolida sus fronteras y su territorio quedará libre de invasiones por lo menos hasta 1814. Con la paz de Westfalia España tuvo que ceder a Francia varios de sus territorios. Luis XIV, sucesor de Luis XIII, es el máximo exponente de la monarquía absoluta.
Basa su soberanía en la noción del “derecho divino de los reyes”, lo que significa que el rey recibe todos sus poderes y autoridades de Dios. Luis XIV, después de la guerra de sucesión al trono de España, se convierte en
rey de España, comenzando así a reinar la dinastía de los Borbones, transformando no sólo la administración española sino también la de sus colonias. El sucesor de Luis XV fue muy débil iniciando así la decadencia del absolutismo, que bajo Luis XVI habría de culminar con la revolución.
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